Una casa moderna está llena de dispositivos que necesitan una conexión a internet fiable: smartphones, portátiles, Smart TV, sistemas de seguridad, altavoces inteligentes y electrodomésticos. Sin embargo, incluso con una tarifa de alta velocidad y un buen router, la señal Wi-Fi no siempre es estable. A menudo se debilita en las habitaciones más alejadas, desaparece en el sótano o se pierde entre plantas.
Por eso, hoy vamos a hablar de cómo elegir un proveedor fiable, seleccionar planes internet hogar y conseguir una cobertura estable con buena conexión en toda la casa sin tener que instalar kilómetros de cables.
Cómo tener Internet en toda la casa
Elegir un proveedor estable y una velocidad de conexión adecuada
La velocidad de internet comienza no con el router, sino con el proveedor. Incluso el equipo más avanzado no te salvará si la conexión no es estable desde el principio.
Tipo de conexión:
Es preferible elegir una conexión de fibra óptica: ofrece mínimas latencias y alta velocidad incluso en las horas punta. ADSL e internet móvil pueden ser inestables, especialmente en zonas rurales.
Velocidad real:
Presta atención no solo a la velocidad prometida, sino también a la carga máxima en tu zona. Prueba la velocidad a diferentes horas del día con Speedtest o similar. Si por la tarde la velocidad disminuye, deberías considerar otros operadores.
Mínimos aceptables:
Para una familia de 3-4 personas, lo óptimo es:
- A partir de 100 Mbps: para vídeo en streaming, juegos online y dispositivos inteligentes.
- Baja latencia (hasta 20 ms): si alguien juega a juegos online o trabaja con VPN.
- Subida estable a partir de 10 Mbps: si usas videollamadas o almacenamiento en la nube.
Soluciones modernas: Malla Wi-Fi, amplificadores Wi-Fi, adaptadores Powerline
Para que la señal Wi-Fi llegue a todos los rincones de la casa, es importante organizar correctamente su distribución. Un solo router rara vez lo consigue. Aquí es donde entran en juego tres soluciones inalámbricas.
Malla Wi-Fi: Cobertura sin interrupciones
Un sistema de malla Wi-Fi consta de un dispositivo principal y varios nodos adicionales distribuidos por la casa. Todos los puntos funcionan como una única red, y los dispositivos (teléfonos, portátiles) se conectan automáticamente al más cercano.
Ventajas:
- Mismo nombre de red y roaming continuo entre nodos.
- Distribución inteligente de la carga y las señales.
- Configuración sencilla a través de una aplicación móvil.
Ideal para: Casas grandes, edificios de varios pisos y locales con una distribución compleja.
Repetidores Wi-Fi: Amplificación puntual
Un repetidor capta la señal del router principal y amplía su alcance. Es un dispositivo compacto que se conecta simplemente a una toma de corriente.
Características:
- No necesita cables.
- Fácil de instalar.
- Puede reducir ligeramente la velocidad total de conexión, especialmente en los modelos económicos.
Ideal para: Si la señal débil se observa en una o dos habitaciones.
Adaptadores Powerline: Internet a través del enchufe
Se trata de un par de dispositivos que transmiten internet a través de la red eléctrica de la casa. Uno se conecta al router y el otro a la habitación deseada. La conexión a internet se realiza a través de un enchufe normal.
A tener en cuenta:
- Funciona solo en una fase de la red eléctrica.
- Ideal para locales donde el Wi-Fi no atraviesa las paredes (hormigón, metal).
Ideal para: Locales con techos gruesos o garajes y anexos.
Identificar “zonas muertas” y solucionarlas para una buena conexión
Las “zonas muertas” son áreas donde el Wi-Fi está completamente ausente o es extremadamente débil. Aparecen por varias razones.
Geometría y materiales:
La señal Wi-Fi se debilita con:
- Paredes de hormigón y ladrillo.
- Estructuras metálicas.
- Espejos y muebles con elementos metálicos.
Ubicación del router:
Un error común es instalar el router en una esquina de la habitación o cerca de electrodomésticos. Esto limita drásticamente el radio de cobertura.
Qué ayuda:
- Colocar el router más cerca del centro de la casa y a cierta altura (por ejemplo, en un armario).
- Alejarlo de microondas, televisores y cableado.
- Instalar puntos de acceso o amplificadores de señal adicionales.
Configuración y seguridad: Protección de la red contra vecinos y atacantes
Incluso la red ideal puede ser ineficaz si se conectan personas ajenas o si es vulnerable a ataques. Es necesario identificar el tipo de seguridad de red inalámbrica.
La seguridad comienza con la contraseña:
- Usa contraseñas complejas: con números, mayúsculas y símbolos.
- Evita combinaciones comunes como “admin123” o “contraseña”.
Configuración del acceso para invitados:
Crea una red de invitados separada para amigos, clientes o asistentes. Esto limitará el acceso a tus dispositivos y datos, sin dejarles sin internet.
Actualización del firmware:
Revisa periódicamente si hay nuevas versiones de software para tu router. Los fabricantes solucionan vulnerabilidades y mejoran el rendimiento a través de las actualizaciones de firmware.
Desactivación de WPS:
WPS (conexión automática de dispositivos) es una vulnerabilidad que se puede explotar fácilmente. Si no la usas, desactívala en la configuración del router.
Crear una red Wi-Fi estable en casa no solo depende de la velocidad del proveedor. Es importante organizar correctamente la cobertura con soluciones modernas, eliminar las zonas débiles y garantizar la seguridad. Usa redes de malla, adaptadores Powerline o repetidores según la distribución de tu casa, controla la configuración del router y no olvides comprobar periódicamente la calidad de la señal. Así, el internet funcionará de forma rápida y estable en todos los rincones de tu casa, desde la cocina hasta el ático.