Durante años, en las especificaciones de diferentes dispositivos con pantallas — televisores, monitores, portátiles, tabletas y smartphones — hemos visto el tamaño de la diagonal expresado en pulgadas. Sin embargo, en la mayoría de los países del mundo se adopta oficialmente el sistema métrico, donde todas las dimensiones lineales se expresan en milímetros, centímetros y metros.
Surge la pregunta: ¿por qué los fabricantes de tecnología siguen utilizando pulgadas? Intentemos comprender este curioso fenómeno.
Razones históricas
La pulgada como unidad de medida de longitud apareció mucho antes de la invención de los dispositivos electrónicos modernos. Proviene del «uncia» romano antiguo, que era igual a 1/12 de un pie romano. En Inglaterra, el sistema de pulgadas se mantuvo durante toda la Edad Media y la Edad Moderna. El Imperio Británico extendió las pulgadas por todo el mundo, incluyendo América del Norte.
Estados Unidos todavía utiliza oficialmente las pulgadas junto con el sistema métrico. Dado que la industria informática masiva se originó en Estados Unidos, las pulgadas se convirtieron en el estándar para indicar el tamaño de los monitores. En la década de 1980, los primeros PC de IBM incluían monitores con diagonales de 12 y 14 pulgadas.
Desde entonces, la documentación técnica y los materiales de marketing para las pantallas de ordenador han indicado tradicionalmente la diagonal en pulgadas. Cuando aparecieron los portátiles y los ordenadores de bolsillo, también se utilizó el sistema de pulgadas para sus pantallas.
Así se creó una situación en la que, para todos los dispositivos con pantallas, desde los enormes televisores hasta los diminutos smartphones, el tamaño de la pantalla se mide en pulgadas.
La comodidad y la universalidad de las pulgadas
A primera vista, puede parecer que el uso de pulgadas es simplemente una cuestión de tradición. Sin embargo, este enfoque también tiene ventajas prácticas.
En primer lugar, las dimensiones en pulgadas suelen ser números enteros o fracciones simples: 6″, 6.5″, 32″, etc. Si se convierten a centímetros, a menudo se obtienen valores difíciles de percibir con muchos decimales: 15,24 cm, 165,1 cm, etc. Para el comprador es mucho más fácil y visual comparar números simples que redondear mentalmente los centímetros.
En segundo lugar, el sistema de pulgadas es una especie de lenguaje universal para los fabricantes de tecnología de todo el mundo. Incluso si una empresa tiene su sede en China, Japón, Corea o Europa, seguirá indicando la diagonal en pulgadas para ajustarse a la práctica establecida. Esto facilita la orientación tanto a los consumidores como a los propios fabricantes al posicionar los dispositivos en el mercado.
Además, las pulgadas se han vuelto familiares y comprensibles para los usuarios. Se ha establecido una especie de estándar «popular»: diagonales de 6-6.5″ para smartphones modernos, 13-15″ para portátiles, 27-32″ para monitores, 40-75″ para televisores. La mayoría de los compradores ya no necesitan convertir estos valores a centímetros para hacerse una idea aproximada de las dimensiones reales de la pantalla.
El área real de la pantalla
Sin embargo, al comparar dispositivos, hay que tener en cuenta que la diagonal en pulgadas no siempre da una idea completa del tamaño y el área de la pantalla. Los monitores modernos se fabrican con diferentes relaciones de aspecto, desde las 16:9 habituales hasta las ultrapanorámicas 32:9. También existen variantes inusuales, como las pantallas con muesca o con bordes redondeados en los smartphones.
Resulta que, con la misma diagonal, el área de superficie real de la pantalla puede variar considerablemente entre diferentes modelos. Una pantalla de 6″ más estrecha y alargada será de hecho más pequeña que una pantalla cuadrada de 6″. Lo mismo ocurre con los marcos alrededor de la pantalla: cuanto más anchos sean, menor será el área útil.
Si necesitas comparar con más precisión las dimensiones visibles de las pantallas, es mejor guiarte por su ancho y alto reales en centímetros o milímetros. Esta información a veces se indica en las especificaciones detalladas de los modelos. O puedes calcular tú mismo las dimensiones aproximadas conociendo la diagonal y la relación de aspecto.
Dato interesante: antes se indicaba la diagonal de la imagen visible, ahora se indica la diagonal de todo el monitor, incluyendo los marcos.
Conversión de pulgadas a centímetros
Si aún así quieres convertir el valor de la diagonal de pulgadas a los centímetros habituales, puedes hacerlo fácilmente tú mismo. Basta con multiplicar el número de pulgadas por 2,54 (que es la cantidad de centímetros que hay en una pulgada).
Aquí hay algunos ejemplos de conversión de los tamaños de diagonales más populares:
- 5″ ≈ 12,7 cm
- 5,5″ ≈ 13,97 cm
- 6″ ≈ 15,24 cm
- 6,5″ ≈ 16,51 cm
- 10,5″ ≈ 26,67 cm
- 13″ ≈ 33,02 cm
- 15″ ≈ 38,1 cm
- 27″ ≈ 68,58 cm
- 32″ ≈ 81,28 cm
- 43″ ≈ 109,22 cm
- 50″ ≈ 127 cm
- 55″ ≈ 139,7 cm
- 65″ ≈ 165,1 cm
Como puedes ver, los valores en centímetros no son tan convenientes ni fáciles de recordar. Pero a veces puede ser útil conocer las dimensiones lineales reales, especialmente para las pantallas pequeñas de los smartphones y las tabletas.
Conclusión
El uso de pulgadas para medir la diagonal de las pantallas tiene una larga historia y se ha consolidado como un estándar internacional. A pesar del predominio del sistema métrico en muchos países, es poco probable que esta tradición cambie en un futuro próximo.
Las pulgadas son convenientes por su universalidad y son familiares para los fabricantes y los consumidores. Aunque no proporcionan una idea completa del área y las dimensiones reales de la pantalla, este enfoque es suficiente para una evaluación y comparación aproximadas de los dispositivos. Si es necesario, siempre puedes convertir las pulgadas a centímetros sin problemas.
Lo principal es que estudies cuidadosamente todas las características del dispositivo al elegirlo y que no te centres solo en un parámetro de diagonal. También es útil ver fotos reales y, si es posible, familiarizarte en persona con las dimensiones de los modelos que te interesen. De este modo, ni las pulgadas ni los centímetros impedirán que elijas el gadget adecuado con la pantalla ideal para tus necesidades.