Con «tecnoestrés» nos referimos al síndrome de estrés derivado del uso excesivo, desmedido y disfuncional de la tecnología, que tiene consecuencias significativas tanto en la vida social como en la laboral de quienes lo padecen.
Con la creciente presencia de la tecnología en nuestras vidas, no sorprende que muchas personas experimenten síntomas de tecnoestrés. La conectividad constante, la sobrecarga de información y la prisa en la gestión de estos flujos pueden contribuir a sentimientos de abrumo, agotamiento y ansiedad, afectando el bienestar digital.
Veamos qué es, cómo reconocer las señales y cómo combatir el tecnoestrés.
Qué es el Tecnoestrés: Ayer y Hoy
Acuñado en 1984 por el psicólogo estadounidense Craig Brod, autor del libro «Technostress: the human cost of computer revolution«, el tecnoestrés se define como una enfermedad de adaptación causada por la incapacidad de manejar de manera saludable las tecnologías de la información y la comunicación.
En 1997, Larry Rosen y Michelle Weil incluyen bajo el término cualquier impacto negativo de la tecnología, directo o indirecto, en actitudes, pensamientos, comportamiento o psique de las personas.
En la era de la hiperconexión, el tecnoestrés se manifiesta como una sobrecarga de información, que debe manejarse simultáneamente en diferentes dispositivos, acompañada de una rápida obsolescencia de hardware y software.
Desde las plataformas de redes sociales hasta las fuentes de noticias en línea, el volumen de información puede ser agotador de procesar y digerir. La dificultad para filtrar el ruido y determinar lo preciso y relevante puede llevar a la parálisis decisional y la sensación de estar abrumados.
Cuáles son los Síntomas del Tecnoestrés
Entre los síntomas físicos del tecnoestrés se encuentran el insomnio, trastornos gastrointestinales, migrañas, dificultades respiratorias, vértigo, fatiga crónica, hipertensión, trastornos cardiovasculares, entumecimiento en las extremidades, sudoración excesiva, entre otros. Los síntomas psíquicos incluyen irritabilidad, depresión, cambios de comportamiento, disminución del deseo sexual, crisis de llanto y apatía.
Sin embargo, la sintomatología puede variar de persona a persona. A menudo, este síndrome no se reconoce a tiempo y puede empeorar, convirtiéndose en un grave obstáculo para las actividades diarias y las relaciones personales.
El tecnoestrés agudo puede causar amnesia y problemas de memoria, afectando también la motivación, la productividad y el ausentismo laboral.
Por qué las Tecnologías Generan Estrés
El profesor T. S. Ragu-Nathan de la Universidad de Toledo en Ohio ha identificado los principales factores que causan el tecnoestrés y aquellos que moderan sus efectos.
Entre los «creadores de tecnoestrés» se encuentra la tecnoinvasión, es decir, la constante conectividad que impulsa a los empleados a trabajar y estar disponibles en cualquier momento. La sobrecarga tecnológica hace referencia a la incapacidad para manejar el alto flujo de información entrante causado por el uso de dispositivos móviles como laptops y smartphones, además de las aplicaciones de software para trabajar en equipo.
Luego está la tecno-complejidad por el tiempo que las tecnologías requieren para aprender a dominarlas. La rápida evolución tecnológica genera una sensación de amenaza para el trabajo y el futuro, lo que provoca la tecnoinseguridad.
Dentro de esta esfera, la tecno-incertidumbre es el cansancio derivado de la continua implementación y modificación de aplicaciones informáticas, a menudo sin un soporte técnico adecuado. Finalmente, el multitasking y, por ende, la búsqueda de un mayor rendimiento en menos tiempo, respondiendo a diversas demandas simultáneamente con uno o más instrumentos tecnológicos.
En conclusión, según Ragu-Nathan, las tecnologías generan estrés debido a su complejidad, cambios frecuentes, altas curvas de aprendizaje, trabajo adicional requerido, multitasking y problemas técnicos y errores asociados.
Los inhibidores del tecnoestrés son variables y mecanismos organizativos que pueden reducir los efectos negativos del tecnoestrés. Formar e involucrar a los usuarios durante la planificación e implementación de nuevas tecnologías es fundamental para reducir la ansiedad.
El Bienestar Digital entre «distress» y «eustress»
En sí mismo, el estrés es la respuesta del cuerpo a situaciones consideradas amenazadoras o desafiantes. El médico austriaco naturalizado canadiense Hans Selye introdujo el concepto de estrés con dos categorías. El «distress» es el estrés que afecta negativamente nuestro bienestar, mientras que el «eustress» es el que tiene un efecto beneficioso y puede mejorar el rendimiento y la motivación. El «eustress» está asociado con situaciones difíciles pero manejables. Es la sensación que experimentamos cuando estamos emocionados, motivados y comprometidos en una actividad que encontramos agradable o gratificante.
Si bien el «eustress» puede ser beneficioso, demasiado estrés de cualquier tipo puede tener resultados negativos. Es esencial mantener un equilibrio saludable y cuidarse para prevenir el estrés. Este estrés positivo puede ayudarnos a mantenernos concentrados, llenos de energía y resilientes frente a obstáculos o presiones.
Ejemplos de «eustress» pueden incluir la preparación para una presentación, la competencia en un evento deportivo o el inicio de un nuevo trabajo. Estas experiencias pueden generar sentimientos de emoción, anticipación y determinación, que pueden ayudarnos a dar lo mejor de nosotros mismos.
Las Aplicaciones para Combatir el Tecnoestrés
Cuando se trata de cultivar el bienestar digital, existen varias aplicaciones móviles diseñadas con este propósito.
Freedom
Freedom es una eficaz aplicación que te ayuda a dejar de obsesionarte con los smartphones. Si te distraes constantemente cuando intentas concentrarte, Freedom es perfecta para eliminar esas distracciones.
Disponible tanto en plataformas iOS como Android, esta app te permite bloquear sitios y aplicaciones cuando necesitas concentrarte.
YourHour
Si no puedes controlar el tiempo que pasas frente a la pantalla, YourHour puede ser una opción ideal. YourHour te ayuda a frenar tu adicción al smartphone y te propone retos divertidos y personalizados para acabar con tu hábito.
YourHour realizará un seguimiento eficaz de tu tiempo de uso y el recuento de desbloqueos durante una semana para informarte sobre tu nivel de adicción. Hay seis niveles de adicción: Adicto, Obsesionado, Dependiente, Habitual, Realizador y Campeón.
Un análisis tan minucioso permite a la aplicación ofrecerte recomendaciones especialmente adaptadas a ti.
Goodtime
La aplicación GoodTime, descargable solo en Android, es una herramienta de planificación y gestión del tiempo que permite crear y gestionar actividades, establecer recordatorios y hacer un seguimiento del progreso.
La interfaz fácil de usar y las funciones personalizables permiten mejorar la productividad y priorizar las actividades de manera efectiva. La aplicación también proporciona informes sobre cómo los usuarios pasan el tiempo, ayudándolos a identificar áreas de mejora.